La electricidad es fundamental en los sitios de construcción, ya que alimenta herramientas, equipos e iluminación. Sin embargo, también representa peligros graves, como descargas eléctricas, quemaduras, incendios y electrocución. Este curso proporciona capacitación esencial para reconocer y mitigar los riesgos eléctricos en cumplimiento con los estándares de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA). A través de directrices prácticas y mejores prácticas, los trabajadores aprenderán a manipular la electricidad de manera segura para prevenir lesiones y fatalidades.
Aspectos Destacados del Curso:
- Comprensión de los peligros eléctricos, incluidas descargas, arcos eléctricos y electrocución.
- Resumen de los estándares de seguridad eléctrica de OSHA y el Código Nacional de Electricidad (NFPA 70E).
- Identificación y prevención de peligros eléctricos comunes, como líneas eléctricas, fuentes energizadas y uso inadecuado de cables de extensión.
- Prácticas seguras para el manejo de herramientas eléctricas, cables y equipos eléctricos.
- Importancia de una conexión a tierra adecuada, incluyendo el uso de Interruptores de Circuito por Falla a Tierra (GFCI) y Programas Asegurados de Conducción a Tierra del Equipo (AEGCP).
- Procedimientos de Bloqueo y Etiquetado (LOTO) para prevenir la energización accidental durante el mantenimiento.
- Precauciones para trabajar en ambientes húmedos o mojados y prevención de incendios eléctricos.
- Responsabilidades del empleador para garantizar un entorno de trabajo eléctrico seguro.
Al Finalizar Este Curso, Habrás Aprendido:
- Cómo identificar y evaluar riesgos eléctricos en un sitio de construcción.
- Medidas de seguridad críticas para prevenir accidentes e incidentes eléctricos.
- Uso y mantenimiento adecuado de herramientas eléctricas, cables y dispositivos de protección.
- La importancia del cumplimiento de las normas de seguridad eléctrica de OSHA.
- Cómo implementar y seguir procedimientos de bloqueo y etiquetado, así como de conexión a tierra.
- Mejores prácticas para prevenir la electrocución y garantizar la seguridad en el lugar de trabajo.
Al aplicar estos principios de seguridad, los trabajadores pueden minimizar riesgos y contribuir a un entorno de trabajo más seguro para ellos y sus compañeros.